Por Mario Rovere. Publicado en Revista Soberanía Sanitaria
Geopolítica contemporánea: diplomacia directa, el mismo deporte, pero sin guantes
Una reiterada prueba que “el poder” es potencial y que la política se basa en las expectativas se verifica cuando un presidente ha comenzado a gobernar cuando aun no ha asumido y que puede dejar de hacerlo, aunque se encuentre aun dentro de su mandato.
La caída de Trudeau en Canadá, el dubitativo acuerdo alcanzado entre Israel y Hamás, la censura a Tik Tok por parte de las cadenas norteamericanas, el desmontaje voluntario de los poco efectivos controles de verificación Facebook e Instagram, ya están ocurriendo, mientras que un J Biden agónico toma medidas cuya eficacia política resulta al menos testimonial y reversible como sacar a Cuba del listado de países que financian el terrorismo en la última semana de su mandato.
Ocupado Biden en otros conflictos, las relaciones bilaterales de China con Australia se han fortalecido, pero se conoce que los republicanos que regresan a la casa blanca sueñan con transformar a Australia en el Israel del extremo oriente.
«Veo a Australia como una cabeza de playa para contrarrestar a China… Por eso AUKUS es tan importante», dijo Michael McCaul, presidente del Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes del Partido Republicano, en una mesa redonda celebrada el miércoles.
Que el rumbo del mundo dependa de las elecciones de una democracia dudosa en donde el voto es voluntario, el sistema de electores burla la voluntad popular y una dictadura bipartidaria se sostiene por mas de dos siglos se pone más de manifiesto cuando, al menos en apariencia, se polarizan las posiciones. Pero los modales de Trump podrían hacer olvidar el obsceno financiamiento en dólares, en equipo y en inteligencia que esponsoreó sufrimiento y dolor en la guerra que la OTAN y Rusia vienen sosteniendo en territorio ucraniano de la que, por lo que parece no resulta tan sencillo salir.
En el frente interno: “Miles de personas, en su gran mayoría mujeres, se han manifestado este sábado a pesar del intenso frío en Washington para protestar contra el presidente electo, Donald Trump, y su inminente toma de posesión, prevista para el próximo lunes. La Marcha del Pueblo ha sido convocada por varias organizaciones políticas y terminará frente al Monumento a Lincoln sobre las 15.00 horas en una manifestación que ha reunido a unas 50.000 personas, según los grupos convocantes. El objetivo es construir un frente común frente a la nueva presidencia de Trump reivindicando cuestiones como la justicia de género, la autonomía del cuerpo, democracia o inmigración.
Mirado desde China la preocupación se centra en los halcones republicanos con más poder e influencia en el Congreso, que le ofrecen a D. Trump más poder de maniobra que durante su primer mandato.
“Cabeza de playa”: Así es como EE.UU. ve a Australia: como una base de primera línea en Asia-Pacífico para mantener la presencia estratégica y militar de EE.UU. en la región y para servir a la «Estrategia Indo-Pacífica» destinada a contrarrestar el ascenso de China. Con el deshielo de las relaciones entre China y Australia, EE.UU. está cada vez más preocupado. Incluso los medios australianos lo han notado: «Las declaraciones de McCaul se suman a la impresión de que, con los republicanos controlando Washington, se puede pedir a Australia que haga más para desafiar a China en Asia-Pacífico, a pesar de la estabilización de las relaciones lograda por el Primer Ministro Anthony Albanese». «Esto pone de relieve una vez más cómo Estados Unidos está instrumentalizando y utilizando a Australia como arma, a costa de los intereses políticos, económicos y de seguridad de Australia, haciendo caso omiso de su soberanía para servir a los intereses nacionales de Estados Unidos», dijo Chen Hong, director del Centro de Estudios Australianos de la Universidad Normal del Este de China, al Global Times.
“Pobre…-América Latina- Tan lejos de Dios y tan cerca de los Estados Unidos”. El interés de la región latinoamericana en la geopolítica mundial se basa justamente en que prospera en la multipolaridad. Las posibilidades de desarrollo autónomo dependen fuertemente de la autodeterminación y de las opciones que, un mundo abierto ofrece, sin quedar sobredeterminados por los bloques hegemónicos
Existe una sentida necesidad de un foro latinoamericano comprometido con el derecho universal a la salud básicamente porque a diferencia de Estados Unidos, el derecho a la salud es un ideal identitario en la región. La Asociación Latinoamericana de Medicina Social y la Fundación Soberanía Sanitaria coinciden fuertemente en este entendido y comienzan a dar sus primeros pasos en este cometido.
Salud Internacional 30 de enero; una oportunidad para reflexionar y revertir la “negligencia” sanitaria
El 30 de enero del año 2012 la OMS definió las denominadas enfermedades negligentemente olvidadas, traducidas al español como “enfermedades olvidadas”. Resulta provechoso por sus efectos políticos y ya un clásico detectar el efecto pasteurizador de las traducciones del inglés al español de las declaraciones de la OMS que se viene denunciando desde Alma Ata a la fecha.
El término “neglect” en inglés refiere a una falla en el acto de cuidar o de proteger a alguien, y en términos legales es usada siempre en referencia a personas y no a cosas.
El documento en su título “Ending the neglect” es traducido como “Poner fin a la desatención” mientras el diagnóstico de los documentos resulta igualmente pasteurizado.
En la traducción literal del original en inglés dos términos que subrayo (negligente y devastador) fueron suprimidos: “Las enfermedades negligentemente desatendidas son antiguas enfermedades de la pobreza que imponen una carga devastadora a nivel humano, económico y social a más de mil millones de personas alrededor del mundo, predominantemente en áreas tropicales y subtropicales entre las más vulnerables y marginadas poblaciones.”
Liberar a los sectores más vulnerables, rurales y periurbanos de nuestras naciones de Chagas, de Leishmaniasis, de Triquinosis, de Lepra, de Micosis profundas, de las helmintiasis prevalentes; prevenir la rabia, disponer sueros para mordeduras de serpientes y escorpiones entre otras afecciones puede suponer una verdadera transferencia de ingresos y un importante alivio en la carga de enfermedades, de discapacidades y de muertes.
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Decolonizar la salud global: Una mirada a la Universidad de las Naciones Unidas y a su Instituto Internacional de Salud Global
Del 18 al 22 de noviembre de 2024, el UNU-IIGH realizó importantes contribuciones en el Simposio de Investigación sobre Sistemas de Salud (HSR) en Nagasaki, Japón. A través de talleres interactivos, sesiones interesantes y presentaciones de investigación impactantes, el UNU-IIGH demostró su compromiso inquebrantable con la creación de sistemas de salud equitativos e inclusivos.
Entre otras actividades destaca en el interés de seguir esta página un “Taller de Futuros Feministas Decoloniales”
Esta sesión participativa, dirigida por Emma Rhule y Tiffany Nassiri-Ansari, presentó a los asistentes los principios feministas decoloniales y las metodologías de futuro. El taller alentó a los participantes a interrogar las estructuras de poder y generar visiones colectivas para sistemas de salud justos y sostenibles. A través de una serie de actividades grupales basadas en el análisis causal en capas, los asistentes identificaron los impulsores pasados, presentes y persistentes de las desigualdades y la injusticia en los sistemas de salud, visualizaron futuros deseados arraigados en un valor compartido de cuidado y bienestar colectivos, y aprovecharon las oportunidades presentadas por un horizonte temporal más largo para recuperar nuestra capacidad de acción no solo para generar, sino también para dirigir el cambio.
A través de estas actividades, la UNU-IIGH no sólo impulsa conversaciones críticas sino que también inspira cambios viables en los sistemas de salud de todo el mundo.
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Adrián Diaz nos acerca; un artículo muy vigente del British Medical Journal de noviembre del año pasado
En su primer mandato, Trump recortó la financiación al Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) y se negó a participar en la iniciativa de distribución de vacunas COVAX. Dada la nominación por parte de Trump del escéptico de las vacunas Robert F. Kennedy Jr. como secretario de Salud, la financiación de la Alianza GAVI puede estar en riesgo. Y dado el papel de la salud sexual y reproductiva en las respuestas al VIH, el Fondo Mundial podría estar en la mira. Si la administración sigue comprometida con la salud mundial, se pueden esperar tiempos difíciles. Entre los riesgos se incluyen la reducción de las contribuciones a las organizaciones internacionales de salud y la presión para modificar los regímenes de propiedad intelectual y los acuerdos comerciales para apoyar los intereses corporativos estadounidenses. Existen preocupaciones sobre el futuro del resultado final del acuerdo sobre la pandemia, negociado durante mucho tiempo.
El gobierno de Estados Unidos es el mayor proveedor de asistencia para el desarrollo en el ámbito de la salud. Es probable que Trump recorte este presupuesto e imponga restricciones al uso de los fondos restantes. Los riesgos para las organizaciones que trabajan en el ámbito de los derechos de salud sexual y reproductiva son bien conocidos, pero áreas como la resistencia a los antimicrobianos también pueden ser vulnerables. Hasta 2016, el fondo para el VIH del gobierno estadounidense, PEPFAR, gozaba de apoyo bipartidista. Trump intentó recortar su financiación durante su primer mandato, pero el Congreso lo bloqueó. Desde entonces, se ha convertido en una moneda de cambio política y su futuro parece estar en juego, dado que Trump tiene mayor influencia sobre el Congreso dominado por los republicanos.
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Hitos de la Salud Internacional III (Comienzo del Siglo XX): La salud en el debut del neocolonialismo
Luego de la guerra que Estados Unidos libra contra una España ya debilitada se anexa los territorios de Cuba, Filipinas y Puerto Rico. Un joven, impetuoso y multifacético líder político Theodore Roosvelt, (Teddy), sin antecedentes militares organizó un pequeño ejército privado para pelear en esa guerra lo que aunado a otros antecedentes lo propulsó a la vicepresidencia de la República.
Sabemos que la sanidad del ejército de los Estados Unidos (Walter Reed) luego del escepticismo inicial, reconoce (y se apropia) del descubrimiento de Carlos Finlay sobre la transmisión de la Fiebre Amarilla.
Este descubrimiento impulsará dos consecuencias geopolíticas. Se puede exigir a los países que mantengan sus puertos libres de Fiebre Amarilla porque, aunque el virus migre, los mosquitos son locales y por el otro lado las incipientes industrias y obras de ingeniería “imposibles” (como el canal de Panamá o la explotación del caucho) se vuelven posibles.
Un inesperado crimen político de un anarquista León Czolgosz, que ninguna organización reconoce, impulsa a Teddy a la presidencia luego de la muerte por infección del presidente William Mc Kinley.
Para esa entonces Cuba con una fuerte incidencia diplomática logra su independencia, pero esa independencia quedará condicionada por un dispositivo que desde entonces será una marca de las relaciones internacionales de Estados Unidos. La denominada Enmienda Platt.
El senador republicano Orville Platt impuso una Enmienda a la nueva Constitución de Cuba, lo que bien podría considerarse una independencia condicionada.
Lo textual resulta mas que revelador en su artículo quinto señala
- Que el Gobierno de Cuba ejecutará y en cuanto fuese necesario cumplirá los planes ya hechos y otros que mutuamente se convengan para el saneamiento de las poblaciones de la Isla, con el fin de evitar el desarrollo de enfermedades epidémicas e infecciones, protegiendo así al pueblo y al comercio de Cuba, lo mismo que el comercio y el pueblo de los puertos del Sur de los Estados Unidos.
¿Y si así no lo hiciere? El artículo tercero lo aclara
III.- Que el Gobierno de Cuba consiente que los Estados Unidos puedan ejercitar el derecho de intervenir para la conservación de la Independencia cubana, el mantenimiento de un Gobierno adecuado para la protección de vidas, propiedad y libertad individual y para cumplir las obligaciones que con respecto a Cuba han sido impuestas a los Estados Unidos por el tratado de París y que deben ahora ser asumidas y cumplidas por el Gobierno de Cuba.
Es por esta razón que ya en un artículo de Eduardo Jolý y Patricio Marquez en el Boletín de la OPS resaltaba que Cuba fue el primer país de América Latina en contar con un Ministerio de Salud.
Para diciembre del año 1902 “Teddy2, el flamante presidente, participó en Washington DC., del lanzamiento de la Oficina Sanitaria Internacional, reconocida como el acto fundacional de la actual Organización Panamericana de la Salud.
Cuando el presidente de los Estados Unidos Theodore Roosevelt dio la bienvenida a los delegados a la Primera Convención Sanitaria General Internacional de las Repúblicas Americanas en Washington, D.C., en diciembre de 1902, sus pensamientos pueden haber estado, al menos en parte, a unas 2.000 millas de allí, en el inconcluso Canal de Panamá.
Ese esfuerzo monumental -que se convertiría en el proyecto favorito del presidente Roosevelt- era el símbolo de los florecientes vínculos comerciales entre las repúblicas americanas, pero también de su creciente vulnerabilidad a la propagación de enfermedades. Abandonado 14 años antes por una compañía francesa, el proyecto del canal fracasó en gran parte por la fiebre amarilla, que junto con la malaria había matado a unos 20.000 trabajadores. Sólo al controlar la fiebre amarilla (erradicada oficialmente en Panamá en 1905) pudo la administración Roosevelt terminar el canal en 1914.
“Casualmente” en 1903 un movimiento secesionista probablemente apoyado por Estados Unidos dio resultado y Panamá se independizó de Colombia, un paso fundamental para la construcción del Canal. Se conoce la entusiasta frase de Teddy, el primer presidente de EE UU. en viajar fuera de su país, al afirmar frente a las obras. “para la construcción de este canal la sanidad ha sido más importante que la ingeniería”.
Tras décadas de lucha, el Estado Panameño logró por vía diplomática en 1977, un tratado de restitución firmado por -el recientemente fallecido- presidente Jimmy Carter. Panamá recuperó la soberanía territorial del canal el primer día del año 2.000. Se conoció estas semanas la amenaza del presidente Trump de desconocer ese tratado.