Por Mario Rovere. Publicado en Revista Soberanía Sanitaria.

“El mal nunca triunfa; porque si triunfase se llamaría bien” P. Coelho

Esta frase refleja adecuadamente el clima de desconcierto que vive la prensa hegemónica cada vez que cambia, a ritmo vertiginoso la lista de a quién debe endiosar y a quien debe denostar. Se nota mucho en el tratamiento del atentado que suaviza y victimiza a Donald Trump y en los reflectores puestos sobre Kamala Harris, “la esperanza”, luego de cuatro años de “ninguneo” mediático. disimulando sus frases políticamente incorrectas como “no permaneceré en silencio sobre la magnitud del sufrimiento humano en Gaza” justo cuando Netanyahu realiza una nueva gira por Estados Unidos buscando apoyo del Congreso e incluso del propio Donald Trump. No debe haber salido muy contento ya que Trump le adelantó que tiene su propio plan de paz para medio oriente y que solo él, ganando, puede detener una tercera guerra mundial.

Los observatorios mundiales minimizaron el masivo sabotaje a la red ferroviaria de alta velocidad previa a la inauguración de las Olimpíadas en París, pero las vulnerabilidades puestas de manifiesto en un país internamente convulsionado e internacionalmente beligerante como Francia no son para ignorar. Mientras tanto los ojos se centrarán este fin de semana en Venezuela en donde se juega un lance electoral que excede los intereses domésticos y se extiende a la arena internacional, el único resultado seguro es que los resultados electorales no serán reconocidos por quienes pierdan la elección.

“Entre la diplomacia y la guerra solo quedan las sanciones comerciales”; así titula un extenso informe publicado esta semana por el Washington Post mostrando la extensión y el rendimiento decreciente de esta herramienta a nivel Mundial. Es decir que no solo “el eje del mal”:  Cuba, Rusia, China, Corea del Norte, Irán, Venezuela, Afganistán y Siria, sino que a lo largo de 6 décadas más de 70 países, -sin contar los innumerables bancos y empresas que comerciaban con ellos-, han sido “sancionados” siguiendo prolijamente los intereses geopolíticos y geoeconómicos de los Estados Unidos y sus aliados. Lo real es que entre la diplomacia y la guerra surgen incesantemente otros nuevos instrumentos tales como el lawfare, la manipulación electoral con los usos de la big data, los hackeos selectivos, los levantamientos policiales, el linchamiento mediático, los asesinatos de líderes, los golpes de mercado y tantas otras innumerables herramientas de manipulación entre las cuales obviamente resulta imposible ignorar las guerras bacteriológicas o microbiológicas. No queda claro si el artículo denuncia o defiende como mal menor la injerencia, pero en todo caso naturaliza el rol de gendarme del mundo libre que Estados Unidos se autoatribuye.

Se puede acceder a la nota completa a través del enlace

Hambre siglo XXI: un nuevo llamado ético del presidente de Brasil

Como pasando una antorcha intergeneracional, el presidente Lula aprovechó la presidencia temporaria del G20 ´para lanzar un llamado mundial en una lucha frontal contra el hambre y contra la evasión fiscal de los super ricos. Lanza al ruedo internacional y se apoya en los estudios sobre inequidad global de un joven economista Gabriel Zucman. Autor entre otras obras del informe mundial sobre desigualdad 2018 es miembro del Wold Inequality Lab.

El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, llamó el miércoles a los gobiernos del mundo a adoptar “soluciones duraderas” contra el hambre, en vísperas de una reunión de ministros de finanzas del G20 en Río de Janeiro.

“El hambre es la más degradante de las privaciones humanas”, dijo Lula al anunciar la creación de la Alianza Global contra el Hambre y la Pobreza.

“En pleno siglo XXI, nada es más absurdo e inaceptable que la persistencia del hambre y la pobreza”, afirmó el mandatario…, visiblemente emocionado durante el discurso.

Se puede acceder a la nota completa a través del enlace

Cambio climático: El calor en las grandes ciudades

Comparando las últimas dos décadas entre sí, la cantidad de días que la temperatura superó el umbral de los 35 grados se ha incrementado significativamente lo que combinado con un incremento sostenido de las temperaturas nocturnas trae importantes consecuencias sanitarias.

Nueva Delhi lidera el ranking pero Paris, Seul, Yakarta, Londres, El Cairo, Tokio y Buenos Aires se intercambian en el podio de las diez megaciudades más afectadas. En el caso de Buenos Aires vio incrementarse en un 344 % la cantidad de días de calor extremo en la última década y Yakarta experimentó 30 dias seguidos de temperaturas superiores a los 35 grados en octubre del 2023.

Los focos de calor no son homogéneos, las megaciudades están más cálidas que su hinterland y disipan menos calor por los pavimentos, por los automotores, especialmente por los atascamientos, pudiendo generar diversos fenómenos biológicos como el incremento de vectores en cantidad y en número de días de amenaza, o meteorológicos como atraer granizo, o revertir el flujo de aire haciendo que los gases industriales en vez de disiparse desciendan y generen nubes tóxicas irrespirables.  

La preparación para enfrentar temperaturas extremas requerirá más temprano que tarde de equipamientos, dispositivos o estrategias para enfrentarlas protegiendo la salud de las poblaciones, especialmente las más vulnerables por edad o por condiciones preexistente.

Se puede acceder a la nota completa a través del enlace

Oropouche y Jejenes: nueva enfermedad y nuevo vector en el radar de las regiones templadas

No es realmente nuevo ya que se ha convertido en una de las causas más frecuentes de síndrome febril en las regiones tropicales. Se detectó en 1955 cuando fue descubierto en la cuenca del rio  Oropouche, en Trinidad y Tobago. No se la conocía como una enfermedad grave y se encuentra difundida en varios países de América Latina como Colombia, Cuba, Guyana pero saltó a los medios esta semana por el registro de dos fallecimientos. Nuevamente como en los casos del Zika o del Chikunguña es la vigilancia epidemiológica de Brasil la que da la alerta en la Región registrando no solo casos y defunciones sino también transmisión vertical (de madre al feto) con riesgo de microcefalia; todo muy relevante dado que en nuestras regiones templadas ya se encuentra el vector conocido comúnmente por su muy molesta picadura con el nombre de jején. Un vector susceptible de expandir su presencia en contextos de cambio climático solo a la espera de un caso importado para comenzar un brote.

Para conocer más sobre vectores como el jején en nuestra región, contamos con el invalorable trabajo de los equipos especializados del Centro de Estudios Parasitológicos y Vectores CEPAVE de  la Universidad Nacional de La Plata. Una comunicación de este año invita a visitar un catálogo de acceso libre y de actualización permanente, enriquecido  con material fotográfico, al que se puede acceder desde cualquier dispositivo.

Se puede acceder a la nota completa a través del enlace